Una muestra, un paciente: la dimensión humana en el Laboratorio Clínico.

Un día en el laboratorio, tiene dos perspectivas, una a nivel de usuario/paciente y la otra desde el analista (personal que realiza las pruebas), profundicemos en cada uno, asumiendo los roles de ambos

Un día en el laboratorio se desarrolla de manera diferente para el usuario/paciente y el analista. Desde la perspectiva del usuario, a menudo comienza con una mezcla de sentimientos entre ellos podríamos mencionar el miedo, ansiedad, estrés, pero también con mucha esperanza de obtener resultados que pueden contener información vital sobre el estado de salud. 

¿Miedo a la venopunción? 

La toma de muestras (venopunción) es una experiencia que está marcada por una sensación de vulnerabilidad e incertidumbre, te ha pasado alguna vez ¿Has sentido miedo a una toma de muestra sanguínea?, probablemente sí, tal como lo menciona Sauceda-García en su estudio “sin importar las razones de índole diagnóstica o terapéutica, la práctica de la venopunción atraviesa tanto el ámbito físico como el emocional del paciente, siendo sumamente inusual encontrar a alguien que no haya experimentado esta intervención, ya sea por necesidades médicas o diagnósticas (Sauceda-García, 2006), estas emociones están asociadas a la respuesta de dolor que el paciente pueda reflejar al momento de la venopunción, claro que influye la edad y el nivel de estrés de cada individuo. 

“A mayor grado de estrés anticipatorio, mayor es el grado de estrés real; a mayor grado de predicción del dolor, mayor es el estrés real durante la venopunción; a mayor edad y mayor escolaridad, menor es el estrés real” (Sauceda-García, 2006).

Imagina hoy, que eres el profesional de laboratorio clínico responsable de la venopunción, que estas en tu cubículo de toma de muestras desde primeras horas de la mañana, será el primer acercamiento en la relación laboratorio/paciente, en este punto estás cara a cara con la fuente y origen de la muestra, descubrirás que cada unos de ellos tiene un sentir diferente, una preocupación particular, una forma de afrontar sus problemas de maneras distintas, en esta interacción paciente/flebotomista debe primar la empatía.

Es un momento para generar una experiencia agradable, ¿de qué manera?, bueno, en primer lugar generando confianza en el paciente, expresando con profesionalismo el proceso a seguir para su toma de muestra, usar palabras amables, escucharlos, entender que siente estrés o temor, aunque veamos que la cola de espera de pacientes el grande, NO olvidar, que es un punto crucial para obtener información sobre la interpretación de los resultados, recordar, que cada uno de ellos requiere un tiempo de atención con calidez humana, es importante enfatizar el lado humano que debe tener el perfil el responsable de toma de muestras, como característica principal, tomando en cuenta que es el único dentro del laboratorio clínico que tiene contacto con el paciente, el personal que toma las muestras tiene la responsabilidad de poder disminuir ese porcentaje de error preanalíticos que va más allá de 60% de errores en el proceso de laboratorio clínico (Pérez-Medel P, 2022)

Esta rutina del día puede hacernos sentir que realmente no trabajamos con pacientes, cuando los errores se presentan, por ejemplo cuando se nos extravió una muestra o tiene un criterio de rechazo no debemos olvidar, que si logramos resolver o si dejamos pasar el error, a quien realmente estamos afectando es al paciente, no al colega responsable que perdió o no aplicó los criterios de rechazo correctamente, ¿Has escuchado algún colega decirte No te preocupes solo es una muestra?, probablemente sí, mi punto de vista es que: El analista, debe ser consciente del impacto humano, que tiene el reporte de una muestra analizada, debe asumir su responsabilidad con profesionalismo y sensibilidad debida.

En el día a día los pacientes llegarán al laboratorio llenos de sus emociones, con la esperanza de ser atendidos de la mejor manera, con la ansiedad de esperar resultados que puedan cambiar su vida, no solo es responsabilidad del que toma la muestra tener empatía, sino que también el analista, el que tiene en sus manos el resultado final, no perder de vista este sentido humano, las muestras no solo son materia a ser analizada, pensar que detrás de cada una de ellas hay un paciente que sufre, que tiene miedos y esperanzas, la responsabilidad de que el proceso analítico sea controlado de tal manera que el resultado sea preciso, confiable y oportuno, es esencial que el personal del laboratorio comprenda esta dimensión humana y trabaje con empatía y compasión. 

Al final del día, nuestro objetivo no es solo realizar análisis, sino también brindar apoyo y vida.

El trabajo en el laboratorio debe ir “Más allá de los resultados”.

Escrito por: Lic. Carlos Guerra M.B.A.

Lectura complementaria:

Sauceda-García, Juan Manuel, Valenzuela-Antelo, Jesús Rubén, Valenzuela-Antelo, Javier R., & Maldonado-Durán, J. Martín. (2006). Estrés ante la venopunción en niños y adolescentes. Boletín médico del Hospital Infantil de México, 63(3), 169-177. Recuperado en 30 de enero de 2024, de http://www.scielo.org.mx/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S1665-11462006000300004&lng=es&tlng=es.

Pérez-Medel P, Rodríguez-Padilla C, Valdez-Echeverría R. Flebotomista: el lado humano en la medicina de laboratorio. Rev Mex Patol Clin Med Lab. 2022;69(1):36-42. doi:10.35366/108007. Recuperado en 30 de enero de 2024 https://www.medigraphic.com/cgi-bin/new/resumen.cgi?IDARTICULO=108007